viernes, 11 de noviembre de 2011

Las Hembras somos Recolectoras y los Machos, Cazadores


Ayer fué uno de esos dias que yo llamo 'tourbillon' una mezcla entre caótico, torcido, sorprendente pero con final feliz.
 Fué uno de esos días que en el trabajo llamamos 'día de las clientas jugosas', de esas que se prueban 15 pares de zapatos y después le dicen al vendedor: 'sólo andaba vitrineando' o aquellas indecisas que se prueban un par de zapatos y se miran, caminan, se miran, preguntan, miran el zapato con ojo clínico, se lo sacan, lo toman en la mano y lo enfrentan al espejo ( nunca entendí eso..) vuelta a ponérselo,  preguntan todo lo preguntable a todos en la tienda incluidas otras clientas y después de 40 minutos de dar jugo terminan comprando el que compró la chica de al lado.Uf, agotador.
 A veces me cuesta entender cómo mis congéneres disponen de tanto tiempo y poco tino para quitarle tiempo a un vendedor que trabaja por comisión. Fué tema de conversación en mi final feliz que resultó ser un after office delicioso con 2 amigos geniales y simpáticos. Mi amigo Rodrigo me dijo: es simple, ustedes las hembras desde el principio de los tiempos han sido recolectoras y nosotros, los machos, cazadores.

Erase una vez....

En la prehistoria, desde que la especie humana vivía en las cavernas eran ellas quienes salían a escoger una a una las frutas, las verduras, las legumbres, las semillas, etc, sabían ver las que estaban maduras, las mas bellas, las que estaban en su punto, ellas eran las que entendían cual era el tiempo justo para desprenderlas y llevárselas a casa, se tomaban su tiempo, tenían paciencia, sabían ver, ver una y otra vez, muchas y repetidas veces y después escoger.
Los hombres eran cazadores, perseguían al animal, iban tras su presa, ponían el ojo en algo que se moviera y fuera comestible y lo convertían en su victima, en su alimento, eran certeros, apuntaban solo a uno, el que satisfacía su necesidad básica, iban al grano.
Esto se ha trasmitido con la genética, se ha pasado de uno a otro “Homo Sapiens” a través de los siglos y de generación en generación, “el macho caza y la hembra recolecta''
 Esto no quiere decir que uno sea mejor o mas importante que el otro, sólo tenemos diferentes “energías primigenias” jaja...
Veamos el comportamiento de una mujer en el supermercado o cuando va a comprarse zapatos o ropa, ¿Qué hace ella? Pues sale a escoger uno a ano los artículos, las verduras, las legumbres, los congelados, las carnes, los enlatados, los zapatos, la ropa, los accesorios, etc. Ve las que están maduras, las mas bellas, las que están en su punto, las mas adecuadas, las que están a la moda, las marcas, las de mejor calidad, ellas son las que saben cual es el objeto ideal para llevárselo a casa, se toman su tiempo,saben ver y escoger el mejor, ESTA ES SU NATURALEZA.
Veamos ahora el comportamiento de un hombre que va de compras o a hacer un negocio, o también por que no, cuando va de tiendas a comprarse zapatos o ropa, ¿Qué hace él? Pues los hombres siguen siendo cazadores, persiguen al objetivo, van tras su presa, ponen el ojo en algo y lo convierten en su razón de ser (y muchas veces también en su victima), son certeros, apuntan solo a un objeto o cosa, escogen rápido entre muchas cosas, seleccionan y compran, sin casi preguntar nada, ESTA ES SU NATURALEZA.

Y fueron felices para siempre...(siempre es una palabra relativa..ya?)
Curiosamente esta definición del comportamiento hembra y macho se aplica a la perfección en casi todas las áreas de las relaciones humanas, especialmente a la hora del apareamiento.Cuando una mujer busca pareja es claramente 'recolectora' y un hombre definitivamente 'cazador'.
El maestro “Osho” opina que el hombre y la mujer siendo fuerzas biológicas y bioenergéticas opuestas cuando se encuentran se revitalizan y se ponen radiantes de una nueva energía, basta encontrarse con el polo opuesto para que la energía se renueve. Pienso que es una maravilla que el cazador y la recolectora se encuentren en “el camino”, en el “DO”, que transiten juntos ese sendero, que se respeten, formen parte de un mismo equipo y que sean UNO con el TODO.

domingo, 6 de noviembre de 2011

Fluye y Sé Feliz


Podría afirmar casi con certeza que este año ha sido el más complicado de mi vida.
Muchos cambios, pérdidas, traumas, desencuentros, decepciones y soledad.
Gracias a la Vida que me regaló una cuota enorme de resiliencia  y aún estoy parada y pataleando, aprendiendo de lo vivido y creciendo de lo aprendido.

Durante este difícil  proceso acudí a todo tipo de ayuda, partiendo por reconocer que la necesitaba ( la ayuda). Me acerqué a Dios mas de lo habitual, fui hasta su casa y compartí experiencias con mujeres que pasaban por similares o peores estados que yo y terminé clamándole ayuda igual que ellas. Medité a diario mirando hacia mi interior para buscar un flotador salvavidas y respuestas. Leí cuanto libro de autoayuda caía en mis manos o pescaba en internet. Lloré hasta el agotamiento cuando nadie me vió y terminé pidiendo ayuda médica, cuestión que quería evitar porque no creía que lo mío era endógeno, tenía la claridad de que era absolutamente emocional. La soledad y la pérdida eran mi karma.

Dios me escuchó, puso en mi camino gente llena de amor y cariño que me acompañó y apoyó. Dejé de buscar salvavidas para salir a flote y me dí cuenta de que hay que tocar fondo para querer salir con fuerza a la superficie. Los medicamentos frenaron mis emociones y me sentí peor al no poder llorar así es que decidí suspenderlos y aprendí que llorar es bueno, tenía que echar para afuera todo el dolor que tenía adentro hasta sanar esa herida con mis lagrimas.  Un día paré de llorar y me di cuenta que la herida ya cerraba. Médite y crecí.

 Ahora veo la Vida desde otra perspectiva, una más clara , verdadera y consistente. Puedo ser yo misma y no desgastarme para agradar a los demás, los que realmente me aprecian estarán siempre conmigo así tal cual soy.

¿Cómo sané? de la manera más simple: me dejé Fluir con humildad, aceptándome primero y perdonándome después. Fluir es la mejor forma de sanar el alma. Fluir es dejarte llevar por lo que te hace sentir bien, por las situaciones, experiencias o tareas que dan satisfacción y paz. Fluir es leer en tu interior lo que realmente quieres hacer de tu Vida, es entonces cuando nos vemos inundados de gratitud por la plenitud de esa experiencia; es entonces cuando podemos afirmar que somos retrospectivamente felices. Pero no se puede ser feliz sin fluir.
 Ahora Yo sé quien soy, me conozco y me quiero con mis defectos y virtudes. Mi alma está en paz, alegre y sigo caminando, ahora feliz conmigo misma, a veces cuesta arriba y a veces rodando hacia abajo, pero siempre con la fuerza para levantarme y seguir.